TRAS LA TEMPESTAD…
...Debería venir la calma a la Comunidad de Madrid. Pocas veces, en la España constitucional se ha vivido una campaña electoral tan bestia, tan bronca, tan crispada, tan polarizada y tan esperpéntica; las propuestas, las posibles medidas, la explicación de los programas electorales o la educación en los debates televisivos han quedado relegados al baúl de los recuerdos en aras del griterío de patio de colegio, de las pedradas, de los carteles injustificables, de los insultos, de los mítines reventados, de las bravuconadas y de los ataques personales. ¿De qué se sorprenden los ciudadanos cuando ven algaradas o cargas policiales? Las causas y las consecuencias de todo ello junto están ahí, sin que a nuestros políticos parezca importarles demasiado. Y si sí, ¿por qué no ponen de su parte para arreglar la situación? Una de las primeras consecuencias de los resultados electorales del 4M ha sido el anuncio del abandono de la política de Pablo Iglesias. El (todavía) secretario gral. de U...