LOS DEBERES DE ADELA.

[Publicado en VALLE el viernes 2 de octubre de 2009].


Estas semanas las aulas de toda España volverán a llenarse de unos niños que, como cada año, tendrán ilusión, incertidumbre, alegría, miedo o hastío ante un nuevo curso escolar que les traerá lecciones, trabajos, amistades/enemistades y muchas dudas ante las nuevas normativas estatal y valencianas en materia de Educación (ya veremos qué pasa con EpC o las clases trilingües y las objeciones a tan polémica asignatura, por ejemplo). Asimismo, en muchos hogares volverá a repetirse la protesta de muchos críos a la hora de hacer los deberes y el mosqueo, la resignación o el pasotismo de los padres ante ello. Escenas costumbristas de esta época del año, que no por repetitivas dejan de ser entrañables o lamentables.
En el ecuador de la legislatura, el curso político también se presenta lleno de deberes para la alcaldesa de Elda. Adela Pedrosa tiene por delante un año plagado de retos, y es de esperar que sea capaz de conseguir una Elda bien iluminada y con aceras reparadas en todas sus calles (no unas sí y otras no, como ahora sucede), continuar apoyando y fomentando buenas iniciativas como “las rutas de Outlets de Elda” (esto por sí solo no va a paliar la crisis del sector, pero es reconfortante ver que alguien hace algo y que además cuenta con apoyo institucional), o que proyectos como el Bus Guiado, la Ciudad del Zapato o el centro comercial dejen de ser ilusiones increíbles para los escépticos y escaldados eldenses y sean realidades que hagan a esta ciudad renacer de sus cenizas y la pongan donde se merece: A la vanguardia de la provincia de Alicante. Los ciudadanos ya saben que esas cosas de palacio van despacio, pero también quieren ver avances, gestos o indicios de que esos planes van saliendo, porque de lo contrario piensan que los han puesto a dormir el sueño de los justos.
La alcaldesa de Elda tiene aprobadas asignaturas como el PAC, la reforma integral de los parques y jardines o la futura regeneración total de los barrios Tafalera y Numancia (gracias al certamen Europan 10, en el que 65 equipos de arquitectos con 41 proyectos compiten con otras ciudades europeas y el Ayuntamiento eldense encargará al ganador –que se elegirá próximamente en Austria- el desarrollo detallado del plan. Éste cuenta con el compromiso financiero del Ministerio y la Consellería, y su ejecución es a largo plazo). Con todo eso se ha apuntado muy buenos tantos y ella lo sabe.
Pero también es consciente de que mejorar su relación institucional con los grupos de la oposición, la Plaza Castelar, el Jardín de la Música, la Policía de Barrio, las líneas de autobuses que faltan, el ocio juvenil y no tan juvenil, las sanciones más duras a los gorrillas del hospital (no estaría mal que se adelantase a la FEMP y presentara una ordenanza municipal efectiva y contundente), a los que no recogen la mierda de sus perros o a los que usan los márgenes del río y los contenedores de obras como su particular ecoparque son sus asignaturas pendientes. Las que más debe atender y con las que más debería esforzarse en este curso que está a punto de comenzar. Dentro de dos años ha de afrontar la reválida en las urnas, y cuantas más materias tenga aprobadas mejor puntuación obtendrá.